El Congreso de los Diputados aprobó el 2 de enero la nueva ley antitabaco. El tabaco estará prohibido en todos los locales públicos. No se podrá fumar en restaurantes, bares, discotecas, puerta de hospitales, casinos, aeropuertos, parques ni colegios.
Esta ley convierte a España en uno de los países más restrictivos referente al tabaco.
Los que se oponen a la nueva ley, creen que los fumadores no abandonarán el hábito y supondrá un problema para el sector de la hostelería.
El tabaco es, según datos de Sanidad, la primera causa de muerte evitable en España. Cada año fallecen unas 60.000 personas; 1.500 de ellas son fumadores pasivos.
Las sanciones para los que incumplan esta ley irán desde los 30€ a los 600.000€, según la gravedad.
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Comentario personal
Me parece muy bien que se prohíba fumar en los establecimientos públicos, sobre todo en los que pueden entrar niños, embarazadas, personas mayores o enfermas porque no tenemos por qué tragarnos el humo de los que fumen a nuestro lado. Pero también me parece un tanto excesivo que se prohíba en establecimientos en los que habían hecho reformas para crear un espacio en el que se pudiera fumar, separado del resto del establecimiento. Al menos que sigan manteniendo esos espacios ya que los dueños se gastaron su dinero en hacer reformas para que se pudiera fumar sin molestar a los que no quieren.
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